Un punto a domicilio entre valioso y un escaso botín

La plantilla del Mirandés regresa de tierras canarias con un buen botín dado el rival que había enfrente, pero también se lamenta la oportunidad perdida de obtener el triunfo después de la expulsión del portero de Las Palmas. “El equipo hizo un buen trabajo y estamos contentos por sacar el punto. Es verdad que el partido se puso de cara muy rápido, pero es un campo muy difícil y al final todos los puntos son importantes. Hay que seguir trabajando todos juntos y los resultados seguro que, tarde o temprano, nos irán acompañando”, asegura el central Juan Gutiérrez.
Algo más crítico fue Salim El Jebari que saltó al césped en la segunda mitad. El extremo marroquí buscó siempre el desborde por banda izquierda, pero nadie aprovechó dos buenos envíos al área: “El míster nos pide que la gente del banquillo sume y es el mensaje que nos transmite. Es lo que intenté hacer cuando salí y es una pena el punto porque creo que podíamos haber sacado los tres, pero ahora a pensar en el siguiente partido”.
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Los rojillos se pondrán ahora manos a la obra para preparar el partido del próximo lunes ante el Castellón que, hoy por hoy, es el equipo más en forma de la categoría. “Desde ya a pensar en el siguiente que es un rival muy complicado, pero tenemos una semana por delante para trabajar y afrontarlo bien”, mantiene El Jebari. Los rojillos acumulan ocho jornadas en la penúltima posición de la tabla.
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