El Barça se pone retos cada vez que juega. El que más le gusta en este final de 2025 es el de remontar partidos. Da igual el rival, el reto consiste en empezar el partido perdiendo e intentar ganarlo dándole la vuelta. En lo que va de temporada ha pasado once veces con un resultado de siete victorias, un empate y tres derrotas. Ni tan mal. Ante el Eintracht salió bien después de una primera parte muy espesa en la que los alemanes supieron maniatar al ataque azulgrana, pero la inesperada irrupción de Koundé como goleador propició el resurgir azulgrana para lograr tres puntos vitales en su lucha por acabar en el top 8 de la Champions.
Si Laliga volvió al Camp Nou 909 días después con el choque ante el Athletic (4-0), la Champions regresó al feudo azulgrana tras 1.140 días de ausencia, en concreto desde el 26 de octubre de 2022 con una derrota ante el Bayern por 0-3. Ante otro equipo alemán como el Eintracht y con un mejor resultado (2-1), la máxima competición europea está de vuelta en el Spotify Camp Nou y lo ha hecho para quedarse mucho tiempo porque estos tres puntos acercan bastante la presencia del Barça en el top 8, su primer gran objetivo.
Gol de Knauff (0-1) en el Barcelona 2-1 Eintracht
Ficha del partido
Flick hizo varios cambios con respecto al equipo que logró la victoria ante el Betis. El hat-trick no le sirvió a Ferran Torres para mantener la titularidad y Lewandowski fue la referencia en ataque. Raphinha y Fermín entraron por Roony y Rashford, titulares en La Cartuja. Lo bueno de este Barça es que tiene muy pocos jugadores cuya ausencia se puede hacer evidente pero no era el caso ante el Eintracht. El cuadro de Toppmöller llegaba a Barcelona como el equipo más goleado de toda la Bundesliga tras el último 6-0 encajado en Leipzig por lo que juntó líneas de inicio ante la fuerte salida de los azulgranas.
Gol de Koundé (1-1) en el Barcelona 2-1 Eintracht
Un gol anulado a Lewandowski por fuera de juego de Raphinha y un gran disparo de Gerard Martín fueron los primeros avisos para la meta de Zetterer antes de cumplirse el primer cuarto de hora. No entraron las primeras ocasiones y como se está haciendo habitual últimamente fue el rival el que se adelantó en el marcador. Nathaniel Brown, jugadorazo, sacó un balón desde atrás haciendo varios regates y se lo dejó a Knauff para que saliera a la contra y tras solventar la presencia de balde batió a Joan García de tiro cruzado. Nuevo partido que obligaba a una remontada a los de Flick para lograr sus intereses.
El Eintracht, con el marcador a favor, parecía hasta cómodo sobre el campo. Estaban cerrando muy bien a Lamine y tanto Pedri como Fermín tenían muchos problemas de creación y a la hora de buscar espacios. La grada del camp Nou se iba impacientando viendo que su equipo no creaba ocasiones, algo que se unía a las faltas y pérdidas de tiempo alemanas. Parecía que se iba a llegar al descanso con ese resultado cuando una nueva contra de Knauff estuvo a punto de significar el 0-2 pero el disparo final de Skhiri se fue alto por muy poco. Tocaba cambiar cosas en el descanso si el Barça no quería complicarse la vida en la Champions.
Gol de Koundé (2-1) en el Barcelona 2-1 Eintracht
Remontada en tres minutos
Flick sacó a Rashford por Fermín en la reanudación para que Raphinha ocupara la mediapunta. No se había cumplido el primer minuto y una indecisión de Koundé dejó a Chaibi en disposición de marcar, pero Joan García detuvo su lanzamiento. Sin tiempo apenas para el análisis el bará tuvo el empate en un remate alto de Raphinha tras pase de Rashford. No podía empezar más emocionante la segunda parte y más se puso cuando Koundé cabeceó un gran centro de Rashford para lograr el empate. El cambio de Flick fue un éxito con sólo cinco minutos jugados.
El gol cambió por completo el partido. La grada llevó en volandas a los suyos a la vez que el Eintracht empezaba a sentirse vulnerable. Y sólo tres minutos después Koundé marcaba el primer doblete de su carrera al cabecear un centro esta vez de Lamine Yamal. El Barcelona llegó todo lo que no había llegado en la primera parte, pero no llegaba el 3-1 de la tranquilidad pese a que el Eintracht no inquietaba. No hizo falta porque el marcador no se movió y los de Flick logran tres puntos vitales para entrar en el top 8 de la Champions.
