Casemiro construye el ‘tres en raya’ del Manchester United

Hasta hace unos días, el Manchester United no había celebrado dos victorias consecutivas desde el inicio de la ‘Era Amorim’. Esta tarde, gol y asistencia mediante de Casemiro, los ‘red devils’ completaron un ‘tres en raya’ tumbando a un Brighton (3-2) que enlazaba tres visitas ‘asaltando’ Old Trafford para comenzar a asentarse en la zona noble de la clasificación.
Apenas había transcurrido un minuto de partido cuando Bruno Fernandes tuvo la primera con un remate a la altura del punto de penalti que se le marchó abierto… mientras que el Brighton amenazó con salir al contragolpe en varias ocasiones. Entre medias, Diallo reclamó un penalti de De Cuyper.
Cunha, acostando en el sector izquierdo acompañando a Sesko y Mbeumo, estaba especialmente ‘enchufado’. Primero, tanteó a Vertbruggen con un disparo lejano y, en el 24′, estrenó su cuenta particular en Premier como ‘red devil’ para hacer el 1-0. Recibió de Casemiro, se abrió espacio en la frontal y ajustó su disparo al palo abierto.
La presión adelantada estaba surtiendo efecto en el Manchester United. Así, de hecho, llegó el segundo sólo 10′ después. Shaw ‘devoró’ a Minteh y cedió a un Casemiro que probó suerte desde la frontal… y obtuvo premio tras tocar en Ayari. Tras el tanto de Cunha, es la primera vez que dos brasileños anotan para el United en un mismo partido.
Sesko también quiso dejar su sello en el partido y rozó el gol con un ‘cañonazo’ desde el interior del área que se marchó rozando el partido. Bruno, por su parte, vio cómo Vertbruggen le negaba el suyo con una mano a ‘quemarropa’ a la vuelta de vestuarios.
Tuvo que aparecer Lammens para mandar a córner un centro que se acabó envenenando para dar aire a un Manchester United que puso tierra de por medio pasada la hora de partido por medio de Mbeumo a pase de Sesko. Segundo partido consecutivo marcando para el camerunés.
Vertbruggen, apoyándose en el poste, evitó que el propio Mbeumo hiciese el cuarto y Welbeck, canterano del Manchester United, empañó con un lanzamiento de falta en el 74′. No se fiaba Amorim, Lammens sacó varias manos meritorias y, en el descuento, emergió la cabeza de Kostoulas para recortar distancias.
La grada quedó completamente silenciada. Pero, justo antes del pitido final, Mbeumo les permitió respirar poniendo el 4-2 en el marcador para un Manchester United que pudo celebrar su tercer triunfo consecutivo en Premier para asentarse, a la espera de lo que haga el Liverpool, en puestos Champions. Llega el invierno… pero en Old Trafford comienza a salir el sol.



