El CD Guadalajara vive horas irrepetibles antes de recibir al FC Barcelona en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. El partido más mediático de la historia del club se afronta desde el vestuario con ilusión, calma y la convicción de que es un día para competir y disfrutarlo a partes iguales.
El capitán Javi Ablanque, símbolo del ‘Dépor’ y hombre de club, puso voz al sentimiento del vestuario. “Es el sueño de cualquier jugador de fútbol”, reconoció, dejando claro que la situación liguera- el equipo castellano es el 17º clasificado de Primera Federación – queda al margen. “La situación en Liga no mancha este partido. Hemos pasado por momentos muy complicados, pero con la estabilidad que tenemos ahora es un día para disfrutarlo y guardarlo”, añadió el central, que destacó el impacto del encuentro en la ciudad. “Conozco a mucha gente, casi a todos los aficionados, y me ha escrito muchísima gente estos días. Es la ilusión de Guadalajara”. El jugador, formado en las categorías inferiores del ‘Dépor’, también confesó que “me gustaría enfrentarme a Lewandowski pero creo que no viene”.
Desde el banquillo, Pere Martí, sancionado precisamente para el gran duelo copero y por lo tanto, no podrá dirigir al equipo, transmitió serenidad y ambición a partes iguales. “Veo bien a los jugadores, a todo el mundo con ilusión. Tenemos muchas ganas”, explicó el técnico, que no esconde su deseo de medirse al Barça con todo su potencial. “Me gustaría que estuvieran todos”, apuntó.
El entrenador del CD Guadalajara tiene claro el plan para intentar incomodar al campeón. “Nuestras opciones pasan por hacer un partido muy serio a nivel defensivo y tener personalidad. Hay que ser valiente y no vamos a renunciar a nada”, aseguró, convencido de que el fútbol siempre deja espacio para la sorpresa. “No vamos a ser ni los primeros ni los últimos que damos una campanada”.
Martí, ex jugador de equipos como el Villarreal o el Málaga, enmarca la cita dentro de un curso cargado de emociones. “Ha sido un año de muchas emociones, con el ascenso y con la Copa. Y ahora este premio. ¿Por pedir? Que pasáramos la eliminatoria”, confesó. Pese a la magnitud del reto, el técnico se mostró tranquilo. “Como entrenador no había vivido algo así, pero he sido futbolista y sé cómo funciona. Tengo a la familia más excitada de lo que estoy yo”.
Lee también
Con el Pedro Escartín lleno y la ciudad volcada, el mensaje es claro desde el vestuario alcarreño. “Nuestras opciones pasan porque la gente nos ayude y nuestra motivación sea la mayor”, concluyó Martí. Guadalajara ya ha ganado en ilusión. Ahora quiere competir su sueño ante el Barça.
